CUANDO NOS AMÁBAMOS TANTO

Buenas noches queridos lectores, hoy es día de tema libre (algo que usualmente me agrada mucho), sinceramente hoy no se que escribir, tengo muchos sentimientos encontrados, esta noche quiero dedicarle mi publicación a una amiga que desafortunadamente ya no esta en este mundo (CENIZA, ojala nos volvamos a encontrar).

 Sucedió no hace mucho tiempo, que dos personas en soledad vagaban por el mundo sin razón de ser, todo era indiferente y sin color, lo único e que en verdad tenían noción era en dormir y despertar, ante los demás estas personas eran sumamente oscas, tristes y  algunos llegaron a pensar que amargadas. Hasta que sucedió un día algo que cambio su vida para siempre, quizá no en el primer momento pero a partir de ahí hubo una chispa muy especial entre ambos así que comenzaron a tratarse sin más ni más.

Los nombres de éstas personas eran TÚ y YO, que al paso del tiempo fueron indispensables una de la otra, no podían pasar el uno sin el otro pese a ser muy distintas, pues mientras TÚ, era social, alegre, gran conversador, algo distraído pues siempre se encontraba ayudando a todos y dispuesto a hacer cualquier cosa por ser felices. YO era algo más posesivo, encerrado en si mismo, centrado en los deberes, siempre con tiempo para consigo mismo pero no para el resto. Ambos se amaban tanto que esas grandes diferencias no fueron importantes hasta cierto momento. La magia entre TÚ y YO era única, lindos detalles, la generosidad de TÚ, se complementaba con la exclusividad que YO tenía para con TÚ, al grado creer que juntos podrían con cualquier cosa y estar por siempre juntos así que TÚ y YO decidieron unir sus vidas.

Pronto las diferencias entre TÚ y YO se hicieron cada vez más grandes, resaltaban los defectos más que las virtudes, la miel se convirtió en hiel, pues se perdía poco a poco la magia, surgieron los reproches a viva voz llegando a los gritos que destruían las paredes de lo que alguna vez fue un ensueño, o mera ilusión de lo que alguna vez llamaron amor. Poco a poco los gritos pasaron a ser costumbre, de hecho todo era una rutina, hasta que un silencio entre TÚ y YO anunciaba la llegada de ALGUIEN que había llegado a la vida de TÚ llenando el vacío que YO había dejado, nuevamente  había un brillo especial en TÚ, la emoción, alegría, los detalles que TÚ había olvidado tener con YO, eran una nueva realidad en la que YO salía sobrando, lo que comenzó como una aventura para TÚ termino volviéndose amor y no enamoramiento algo que sólo sentía por YO, ese sentimiento fue más fuerte así que TÚ dijo adiós a YO.

Mientras tanto YO encerrado siempre en si mismo, se pregunto que pudo suceder, estaba consiente de que ambos cometieron errores pero la frivolidad, el egoísmo eran algo que no podría repetirse en una nueva relación, así que YO decidió hablar con TÚ  pese a ser ya muy tarde pues ALGUIEN estaba ahora en lo profundo del corazón de TÚ. YO miró fijamente a TÚ, pese a ser orgulloso y sentir que un tempano de hielo atravesaba su corazón pregunto ¿TÚ recuerdas cuando nos amábamos tanto?, los buenos momentos que pasamos juntos, todas las promesas que hicimos y que jurábamos que seríamos por siempre el uno para el otro, parece que fue ayer cuando lo decíamos. TÚ, miro fijamente  a YO  y dijo, si lo recuerdo pero en algún momento esto dejo de resultar, algo cambio entre ambos y no se que fue, hasta hoy: El amor que decíamos sentir no era lo suficientemente fuerte para hacer frente a lo que comenzó por un simple silencio que terminó transformándose en una rutina matando el sentimiento que sentíamos. 

YO- Sólo asintió con la cabeza, y admitió también haber dejado de sentir la magia desde hacía mucho tiempo, sólo que al ser YO no podía aceptar que había perdido, y quiso aferrarse a algo que ya no existía.

Finalmente TÚ y YO se miraron fijamente como al principio de la historia pero esta vez para darle paso al fin y nuevo comienzo para ambos. No fue hace mucho tiempo la magia que había entre TÚ y YO, pero si hace mucho cuando tomaron caminos distintos pese a seguir siendo parte el uno del otro.

ARAS