jueves, 12 de septiembre de 2013

DUENDE MISERABLE

Lamento haber estado ausente por varias semanas. Espero que les guste esta historia: 

Existió en cierto tiempo una chica inteligente que no sabía que lo era. Creía en el amor y en el infinito. Era una chica linda. Habia besado varios sapos pero ninguno se había convertido en príncipe. Entonces, cierto día beso a uno y se convirtió en "príncipe". Lo que ella no sabía era que no era un príncipe real, si no un duende haciéndose pasar por príncipe. A la chica le encantó, y fue víctima de sus encantos. Se entregó al "amor" como pocos en este mundo. Sin embargo, al malévolo duende "príncipe" no le interesaba hacerla feliz, mientras ella no se daba cuenta, besaba a otras princesas sin el más mínimo rastro de conciencia. El la trataba mal, le mentía, la engañaba. Pero para ella él era su príncipe, ella creía que el era el amor puesto que con el creía haberlo conocido. El duende se creía inteligente y tomaba a la chica por estúpida. El duende tenía muchos ases bajo la manga y hasta llegaba a utilizar magia para seguirla seduciendo. Como dije, la chica era bella, y venían varios caballeros de varios reinos a verla con la esperanza de tener una oportunidad. Todos en los cuarto reinos se daban cuenta de la clase de animal que era el supuesto "príncipe" excepto ella. Así que se creían mejores. La chica los rechazaba a todos. Ella quería al duende. Hasta que cierto día empezó a ver más allá, a utilizar su inteligencia y poco a poco se daba cuenta de lo que hacia el duende. Sin embargo el utilizaba magia. Pero entonces, el último día de verano llego un campesino. No era príncipe ni noble, tan solo un campesino. El llego a trabajar pero de inmediato se fijo en la linda chica. 
El sabía que no tenía ninguna oportunidad con una princesa como aquella. Así que cantaba en silencio todas las noches junto a su ventana viéndola dormir. A veces canciones de amor. A veces, cuando estaba enojado por cómo veía que trataba el duende a la chica de sus sueños, cantaba "duende miserable", decía algo así:
"Oh señor ayuda a mi amor
A abrir sus lindos ojos de color
Dadme un poco la razón
Ese duende miserable no tiene compasión,
Oh señor, ahuyenta al duende miserable
De su tierno corazón."
Cierta noche ella lo escucho, abrió la ventana y al fin lo conoció. Para no hacer el cuento más largo, las principales líneas de su conversación fueron las siguientes: 
-Quiero que veas lo que tus ojos no han querido ni podido ver. 
-¿Como podría hacer eso?
-Con los ojos del corazón.
Dicho esto caminaron por el parque cada noche desde ese día. El hechizo del duende se debilito bastante rápido. 
El campesino utilizo una magia diferente, utilizo la magia del amor verdadero.

FIN.

domingo, 8 de septiembre de 2013

Pintar la realidad



Busca él una forma de relajarse, lo disfruta y es tan simple. Pero viéndolo, noto que tiene actitudes cobardes, lo miro y casi lo sale corriendo de su presente, sin aceptar ni observar lo que lo rodea, ignora mi presencia, y ríe sin detenerse. Dice ser feliz, cuando se encuentra en un estado de éxtasis, y para mí, esa es una felicidad disfrazada. Sé capaz de enfrentar tus problemas, ocúpate, y no intentes escapar de ellos- le aconsejo, ya que te perseguirán cuando tú regreses de esa “armonía momentánea y ocasional”. Se te ve ido, y agresivo, estás en otro mundo, no encuentro manera de recuperarte, todo lo he intentado, sólo queda que te des cuenta del cómo te arrastras a los demás contigo, porque comienzas a perder la razón, y dejar de atender lo que te atañe, dejas de sentir, otra cosa que no sea la del deseo de obtener tu dosis. Tus seres queridos te gritamos y no escuchas, tienes la vista ida, quién sabe a dónde...te seguimos gritando que regreses, una lágrima cae de tus hinchados ojos. Y sólo has de decir: -Pintar la realidad, me lleva a otra que atormenta mi ser, mi verdadero ser.