sábado, 21 de mayo de 2011

Aborto

Hey! ya regresamos! y esta vez estamos recargados con dos nuevos cazadores. Bienvenidos a esta tercera temporada de cazadores, yo soy Richo (Aster) y pues espero que sigan leyendonos y comentando. Sus comentarios son super importantes para el desarrollo del blog.
Bueno, pasemos al tema de la semana... supongo que a estas alturas ya saben que es el aborto. Pues, como es mi costumbre, escribi un "cuento" si se le puede llamar asi. Saludos y espero les guste. Sigan comentando y un gusto estar de regreso.

Era mi niño, mami. 


" Hace frio aquí mami. Demasiado frio. Me duele la panza y el doctor no se ve tan confiable ahora. Escuché de una amiga que él era bueno, que me podría quitar este peso de encima sin mucho dolor. Pero ahora tengo miedo, no quiero quitármelo de encima. Pero ya no hay pasos para atrás, si lo tengo encima más tiempo, tú te vas a dar cuenta y no quiero que te enojes mami. En verdad no quiero. 

El metal de la mesa esta helado, muy helado.  La delgada bata que me pusieron no sirve para cubrirme de su tacto. Tengo miedo. Mucho miedo. 

El doctor sacó algo parecido a una aguja conectada a un tubo y lo puso en la mesa de al lado, ahorita me está inyectando algo… creo que es anestesia. ¿Crees que eso me  quite el dolor de conciencia? ¿O el del corazón? 

Dice que todo va a estar bien. Se ha puesto sus guantes y ahora abrió mis piernas.  Estoy temblando aunque ya casi no siento nada de mi cuerpo. Pero él esta protestando. No el doctor mami, el niño esta protestando. Escucho su pequeña voz. Esta pataleando en mi panza mami, ¡está pataleando!  Es la primera vez que siento algo así. Estoy feliz, Muy feliz mami. ¡Espera! ¿Qué está pasando? ya no puedo hablar ni moverme. No quiero que se lo lleven.¡ No, por favor no!  

Puedo sentir el tacto de el doctor, ¿o me lo estoy imaginando?  Empezó a sonar algo. ¡Como… una aspiradora! ¡Sí!  Así suena mami, suena como la aspiradora en la que me subía de pequeña a jugar, y tú me jalabas por toda la casa. ¿Lo recuerdas? Por favor perdóname mami, ya no soy más tu niña. Quiero regresar a serlo, pero el tiempo ya pasó y ahora es demasiado tarde para eso. 

No puedo hablar, sin embargo estoy sintiendo tanto dolor que no puedo contenerlo. Yo me escucho gritar, pero el doctor no me hace caso. Entre mis ojos medio cerrados puedo ver como mete esa aguja con manguera dentro de mi mami. No me duele eso, me duele mi vientre. Ya no quiero estar aquí mami, desearía nunca haber venido. Espera, alguien está llorando, que bonito se escucha mami, es como el canto de los pájaros. Pero eso no es un pájaro, ¡Es Fernando el que esta llorando! Esta llorando adentro de mí. Es la última vez que lo voy a escuchar.

Fernando. Así se iba a llamar mami, así se iba a llamar. Tal y como su padre." 

Richo.


1 comentario:

  1. Yo creo que el aborto es un tema bastante delicado. Los hay que dicen que es mejor de una vez terminar con una vida no empezada que arruinar dos. Que la madre tendrá una existencia por siempre ligada al hijo, sin cumplir todos sus sueños de antaño y que el hijo no tendrá un buen futuro, criado por una inexperta que probablemente no tenga los recursos para darle una vida digna.
    Desgraciadamente la mayoría de los hijos de madres adolescentes efectivamente no tienen la vida que deberían, y terminan por repetir el patrón. Sin embargo, personalmente conozco casos de gente destacada y valerosa que en algún momento fue (suena horrible decirlo) pensada para ser abortada. Si tu hijo va a sobresalir o no, si va a tener una vida digna o no, si su existencia va a contribuir con algo o si repetirá el mismo patrón, todo esto es un volado. Pero de cualquier manera, todos deberían tener el derecho de intentar.

    ResponderEliminar