Al caminar en este mundo aprendes que la vergüenza va acompañada del orgullo y que lo importante para llegar a ser fuerte es aprender de las perdidas como de las ganancias.
Hay momentos en que todo lo que planeaste, aquello por lo que luchaste y diste toda tu vida se cae, se pierde.
Al ver que tus sueños se están desmoronando y que el triunfo se aleja cada vez mas, no debe haber razones para llorar, ni para estar triste, ni para pensar en que ya nada se puede hacer y mucho menos darse por vencido.
Aun cuando crees que cada paso que das empeora la situación y no tienes las respuestas a las preguntas, dudas o incertidumbres que te afligen, debes de tomar cada parte de tu corazón y tienes que creer en ti, porque nadie mas lo hará.
Al creer que puedes hacer mas de lo que te imaginas podrás encontrar un rayo de luz en una inmensa oscuridad, atravesando las sombras que te atormentan dejando atrás el pasado junto con los errores, mirando hacia el frente, mirando hacia un presente donde no haya promesas sin cumplir.
Al triunfar obtienes poder pero mas poder obtienes al levantarte tras una derrota.
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