sábado, 19 de marzo de 2011

Yo voy a ser...


“¿Que vas a ser de grande?”
“Yo quiero escribir cuentos”
“Pero los que escriben cuentos no ganan nada, mejor sé un bombero”
“No me gustan los bomberos. Me gusta leer”
“Leer y escribir no te va a traer dinero para la familia”
“¿y eso que? a mi me gusta hacerlo”
(Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. Gracias Mamá)
En primer lugar: perdón por no escribir los últimos 3 viernes, pero he tenido unas broncas muy fuertes con la escuela y no he podido publicar. Pero en fin, ya estoy de vuelta y en los sábados (yayy)
Esta plática se dio cuando yo tenía aproximadamente 9 años, a esa edad yo ya leía libros. De hecho era el único de mi clase que leía cuentos sin dibujitos y eso me hacia situarme en la categoría de “raro”
Desde pequeño uno siempre quiere ser muchas cosas. Bombero, electricista, físico nuclear, batman, etc… pero yo siempre tuve este sueño de escribir cuentos para niños y que ellos los leyeran. Claro, ahora con la adolescencia y con los textos que escribo no podré ser un “cuentacuentos” sino hasta que sea mayor y deje de tomarle tanta importancia a lo amoroso.
Pero ese no es el punto de ahorita. Lo que ahora voy a tatar es ese lado obscuro que tienen los padres respecto a nuestras carreras. Llamado también: “Tu vas a ser todo lo que yo no fui” o “Tu vas a ser lo que yo quiera porque se lo que es mejor para ti”.  Claro, hay algunas excepciones con respecto a esto. Pero  la gran mayoría de nosotros lo hemos pasado. En lo personal yo tengo una madre que se negaba rotundamente a que yo estudiara algo que no tuviera que ver con ciencias exactas (Claro, hasta que se dio cuenta que tengo la inteligencia de una papa con respecto a eso) . Pero terminé eligiendo yo mi carrera. Sí, los papás pueden decir muchas cosas acerca de nuestro futuro, pero al final el único que va a vivir su vida eres tú. Ellos te pueden decir “Si, ve y estudia contabilidad” y estudiarías contabilidad solo para no defraudarlos, pero ¿que es lo que ellos pueden hacer al final de tu carrera? Ellos no irán al trabajo que tú no querías. Ellos no habrán estudiado todo lo que no te gustó estudiar. Ellos solamente te pueden decir “Bien hecho” y dejarte con la vida de contador por delante.
Es cierto que los padres muchas veces estarán  en desacuerdo con tus elecciones, pero como buenos hijos reprochadores que somos, debemos de convencerlos de lo contrario (debido a que ellos nos apoyarán por los siguientes años de la carrera.
Bueno, aquí termina mi entrada debido a que tengo que ir a vacunar a mi perro. Así que, ojalá se encuentren súper y nos vemos el próximo sábado.
Saludos. 

Aster

No hay comentarios:

Publicar un comentario